El autor, V.M. Rabolu (1926-2000) nacido
en Tolima (Colombia) fue, sobre todo, un hombre excepcional que dedicó
toda su vida al servicio de la Humanidad con la intención de compartir y
transmitir sus conocimientos universales al mayor número de personas
posible, teniendo siempre presente un único interés: el de servir. Es
por ello que los derechos de edición de su obra
“Hercolubus o Planeta Rojo” fueron cedidos a editores por él
seleccionados de forma totalmente gratuita.
Conocedor del potencial del ser humano,
estaba convencido de que la única fórmula para conseguir las
transformaciones que son urgentemente necesarias para nuestro planeta se
encuentra en el cambio interior de cada individuo.
Los hechos anunciados en su obra
“Hercólubus o Planeta Rojo”, son cada vez más evidentes, como queda
demostrado en las reiteradas advertencias de los especialistas de la
comunidad internacional sobre las terribles consecuencias del cambio
climático.
Grupos medioambientales y científicos
alrededor del mundo están haciendo un coro unánime denunciando la
necesidad de hacer algo inmediatamente para “salvar al planeta”, que es
nuestra única oportunidad de vida.
A pesar de todo lo que se hace, es muy
poco para superar los elementos que se oponen a la verdadera renovación,
a menos que cada uno de nosotros haga su parte, desempeñando acciones
prácticas y conscientes para conseguir los objetivos deseados, con
resultados profundos y constructivos, y eso es lo que quería el autor.
Es por eso que su obra está tomando
dimensiones globales, sea por el impacto profundo y constructivo que
conlleva el tener millones de lectores en todo el mundo, sea por la
posibilidad de verificación directa de su contenido. Día tras día muchas
personas de todas las edades y culturas están desarrollando una voluntad
de cambio en relación a sí mismos.
Con su lenguaje simple y directo V.M.
Rabolú no sólo nos advierte, sino también sugiere un camino a seguir, a
todas las personas de buena voluntad que sean capaces de avalar,
investigar y comprobar la veracidad del mensaje.
Su obra no es solamente para leer sino principalmente para ser vivida.
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